Este lunes el partido duró una media hora. La que los Oscuros tardaron en darse cuenta de que les faltaba uno.
Comenzó el partido con dominio Oscuro, que increíblemente no notaba que estaba jugando con 4, en lugar de 5. Sin saber como, los Claros parecían en inferioridad y los Oscuros jugaban con precisión. Por tres veces Ruben puso el balón en la red para los Oscuros, y sin embargo no sufrían mucho en defensa. La efectividad era altísima y presumía una tarde no muy complicada, hasta que, en otro alarde de deportividad, Jacobo tumbó primero al portero para luego, aprovechándose de la situación conseguida de forma irregular, hizo el 3-1.
Esto afectó de alguna manera al equipo Oscuro, que paso de hacer las cosas medianamente bien, a hacerlo rematadamente mal. Por tres veces seguidas, regalos del último jugador que iniciaba la jugada perdió el balón en lo que Manolo definió como la "zona comprometida" y no hubo dificultad en terminar la jugada con gol para los Claros. Así, sin comerlo ni beberlo de ir con un 3-0 en el marcador y risas y eso, se pasó a un 3-4 con menos risas, y enterándose que de que realmente, Oscuros, solo eran cuatro. Quedaba media hora de partido y el mundo se puso cuesta arriba para el equipo Oscuro.
Dado que la moral estaba huyendo "por patas" en el equipo Oscuro, el físico debió pensar que "tonto el último". Por tanto sin físico y sin una mentalidad apropiada, el goteo de goles no paró y en un plis plas los claros mandaban en el marcador por 3-7. Todo el equipo se unía a la fiesta del gol, y quitando una jugada aislada de Manolo que finalizó con éxito que por un momento pudo parecer una remontada Oscuro, los Claros dejaron bien clarito que estaban muy por encima del nivel de sus rivales. Sin un esfuerzo excesivo los machacaron y el marcador reflejaba un 4-13 que no admitía duda. Los Oscuros se estaban marcando un "walking dead" sobre el campo, mientras sus rivales hacían la conga en el campo y en la grada. Otro gol de los Oscuros sobre la bocina dejó el marcador en un inapelable 5-13.
Por segunda vez en la temporada que los Claros se imponen sin piedad sobre los Oscuros. Esta por ver como reaccionarán sus rivales para la semana. El entrenador Claro solo pudo alabar la mentalidad de sus jugadores que se recuperaron de los tres mazazos iniciales, y se refirió a su jugador franquicia Jacobo como el nuevo Diego Costa, muy efectivo y que sabe jugar al "otro fútbol". Por su parte, el entrenador Oscuro le echó la culpa a las lesiones de Carlos, al que definió como el nuevo Leo Messi (desde la redacción, aunque no dudamos de la calidad del chaval, suponemos que lo dijo por las veces que está dejando tirado al equipo). Esperemos que esta polémica no enturbie el excelente ambiente que reinaba en el vestuario desde el año pasado cuando semana a semana machaban a sus rivales. La afición Oscura empieza a impacientarse con este nuevo estilo de juego al cual no le acaban de ver la puta gracia.
CAMBIOS:
Miguel por Roi
Manuel por Juan
Nadie vino por Carlos